Te diré lo siguiente mientras se enfría la taza de leche: lo que tenemos a nuestro favor, como fotógrafos, y nos diferenciamos de aquellos que sólo presionan el botón de la cámara es precisamente la habilidad de dibujar con la luz: direccionarla, buscar el contraste y realizar la composición, antes de hacer la toma. Se ha visto mucho de las mismas fotos en las redes sociales de la toma cenital de la taza de café con una porción de pastel, torta, pan, etc. Esa foto que no comunica nada y sólo se convierte en una copia de otras. Sin embargo, se puede cambiar el sentido si se realiza una composición e iluminación adecuadas.
-Tomo un sorbo-
La fotografía va más allá de tener en nuestras manos la mejor cámara y el celular más inteligente. El dispositivo no hace la buena foto: claro que sí te ayuda a obtener mayor nitidez. Puedes tener la cámara de vanguardia pero, ¿qué sucede cuando debes configurar el diafragma, el obturador e ISO? ¿Qué debes hacer para tener un mayor o menor contraste de luces y sombras? ¿Cómo debes direccionar la luz para iluminar aquella parte y la otra no del sujeto? ¿Qué encuadres y planos usar?
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Si eres de los que ignoras el proceso verdadero de hacer una foto, piensas que es sólo de apuntar y disparar, por favor, sólo invítame una taza de chocolate.
¡Gracias!
Buen artículo estimado Carlos, la fotografía no es cuestión de la mejor cámara o el mejor software de edición fotográfica, es cuestión de estética y buen gusto.
Saludos!
David – ecuador turismo cultura y fotografía.
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